viernes, 16 de agosto de 2019

Historias de los límites entre Los Molinos y El Espinar (2)


Historias de la pérdida por Los Molinos de dos de las tres cumbres de La Peñota y de la del Cerro del Mostajo
El que dos de las cumbres de La Peñota y la del vecino Cerro del Mostajo pertenezcan formalmente al municipio de El Espinar era conocido por algunos de nosotros y nosotras, aunque según parece no por el equipo de gobierno de nuestro Ayuntamiento ni por la mayoría de los vecinos y vecinas, a pesar de que este tema salió en el Pleno del 12 de abril de 2012, cuando a raíz de un debate sobre los límites con Guadarrama y la negativa del PP a ratificarlos (para que una finca de una persona “de influencia” siguiera estando en Los Molinos, lo que en su imaginario facilitaría su reclasificación a terreno urbanizable más pronto o más tarde) les reproché que se negaran a ratificar los límites con Guadarrama, que ya habían sido acordados entre los dos Ayuntamientos y que al no concretarse implicaba no ingresar el IBI de un grupo de chalets junto a la M-614, y que sin embargo hubieran ratificado en 2004 la pérdida de las cumbres de La Peñota sin preocuparse. Por la cara que pusieron, entre ellos el actual alcalde, entonces concejal, por su falta de respuesta y por su actuación en mayo de este año, quedaba claro que no sabían de qué se hablaba.
Página del acta del Pleno del 12 de abril de 2012, en la que se habló de los límites con Guadarrama y salió el tema de la pérdida de las cumbres de La Peñota
Es evidente que el que esas cumbres no sean compartidas por nuestro pueblo no modifica para nada ese espacio natural, que sigue siendo montaña y muy bello. Pero implica una pérdida de identidad innecesaria, por errores y desidias, pues esas cumbres fueron compartidas con El Espinar desde que se estaba en la jurisdicción del Real de Manzanares, lo que fue ratificado, como mostraremos, en las actas de deslinde con El Espinar en el año 1672 y ha sido considerado así por los vecinos y vecinas durante centenares de años y aun hoy.
También, al pertenecer legalmente a otro Municipio, otra Provincia y otra Comunidad Autónoma, las regulaciones que sobre las cumbres se establezcan no provendrían de un acuerdo sino de las decisiones de El Espinar, Segovia y Castilla y León, lo que podría generar efectos no deseados.
En primer plano, el tercer pico de La Peñota, Peña de Gibraltar, el único que es compartido entre Los Molinos y El Espinar, con el hueco cuadrado que indica que allí hubo un hito (Foto ARG)
Cumbre del Cerro del Mostajo, situada en su totalidad en El Espinar, con el mojón que tendría que marca el deslinde. Al fondo los tres picos de La Peñota.
Cumbre del Cerro del Mostajo, mirando hacia el Alto del León, con los restos de una casa refugio del Ejército Popular de la República y el hito que debía marcar el límite entre los términos de El Espinar y Los Molinos (Foto ARG)
Veamos la más reciente historia de esa pérdida:
Los deslindes del año 2004
En el verano de 2004, cuando en el marco del Convenio de Cooperación suscrito entre el Instituto Geográfico Nacional y la Comunidad de Madrid, se llevaron a cabo los trabajos y las reuniones para replantear, amojonar y realizar el levantamiento topográfico de la línea límite entre los términos municipales de Los Molinos y El Espinar, se reconocieron y definieron nueve mojones que compartíamos Los Molinos con El Espinar (dos de ellos compartidos también con los vecinos municipios de Cercedilla, al Norte de la línea límite, y Guadarrama, al Sur de la misma)
 
Portada del documento de deslindes del año 2004
Este replanteo de los mojones que delimitan nuestro término municipal se hizo con la asistencia y el acuerdo de las comisiones municipales nombradas al efecto por el Ayuntamiento de Los Molinos y el Ayuntamiento de El Espinar y en esos trabajos se reconocieron nueve mojones y se consideró que la línea límite entre nuestro pueblo y El Espinar era la línea recta que va uniendo esos mojones, por lo que se ratificó así la pérdida de las cumbres citadas.
Ese concepto “moderno” y extraño de trazar líneas rectas teóricas entre mojones obedece a una simplificación tecnocrática, que no tiene nada que ver con la realidad del terreno y con la lógica de los deslindes. Desde siglos atrás, la línea límite entre ambos municipios había venido siendo la tradicional “divisoria de aguas” o la cuerda, lo que es un sistema de probada lógica y que se ha usado en todo el país.
Además, esos límites venían marcados también por la existencia de una valla de piedra seca que recorría y recorre esa divisoria y que servía también para separar las zonas de pastos de ambos municipios e impedir que el ganado de uno u otro pasara a pastos que no les correspondían. Esa valla sigue existiendo, incluso en la cumbre de La Peñota allí donde hay paso posible, en el Cerro del Mostajo, en el Cerro de la Peña del Cuervo y en el Cerro de Matalafuente, aunque en esta zona hay tramos en los que ha sido sustituida por una fea valla de alambre. Pero el caso es que existe esa delimitación, que no coincide con la oficial. Si ahora se planteara construir una nueva valla siguiendo las líneas rectas vistas desde la alzada del plano, ésta tendría que subir y bajar por barrancos, riscos y farallones multiplicando su recorrido de manera absurda. En definitiva, un absurdo de oficina del IGN y del que el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid no supieron ser conscientes.  
Valla de alambre situada en la divisoria de aguas (Foto ARG)
Valla de piedra seca que recorre la divisoria de aguas junto al mojón número 5 (Foto ARG)
Valla de piedra de la divisoria de aguas entre el Cerro del Mostajo y La Peñota (al fondo) y casa refugio de la Guerra Civil. Actualmente esta valla estaría dentro del término municipal de El Espinar (Foto ARG)
Valla de piedra en la divisoria de aguas (Foto ARG)
Igualmente, a lo largo de esa valla de piedra que marca el deslinde lógico entre nuestros dos municipios, existen también profusión de mojones de Monte Público que han delimitado el nº 40, perteneciente a la Comunidad de Madrid, aunque según el acuerdo de 2004 ahora también bastantes de esos mojones se encontrarían en la Comunidad de Castilla y León.
En la documentación actual de la Comunidad de Madrid sobre los Montes de Utilidad Pública siguen apareciendo
las cumbres de La Peñota y la cumbre del Cerro del Mostajo en el Plano del Monte nº 40, nombrado como “El Pinar” y propiedad del Ayuntamiento de Los Molinos, como podemos ver en la ficha siguiente:
Ficha del Monte nº 40, en el documento “Montes de Utilidad Pública de la Comunidad de Madrid”, publicado por la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, en la que se puede observar que dicho monte sigue el deslinde tradicional con El Espinar
Y en los planos de la Comunidad de Madrid disponibles en PlaneaMadrid, se ve con más claridad las diferencias entre el deslinde de los términos entre mojones (líneas rectas en negro) y la delimitación del Monte nº 40, en morado:
Captura de pantalla del visor cartográfico de la Comunidad de Madrid, con la delimitación del Monte nº 40 sobrepasando los límites del término municipal de Los Molinos, de acuerdo al deslinde vigente
Uno de los mojones de cruces no reconocido en el deslinde de 2004, junto a un hito de Monte Público (Foto ARG)
Otro de los mojones de cruces no reconocidos en el deslinde de 2004 (en primer plano con la cruz grabada) junto a un hito de Monte Público (Foto ARG)

En los deslindes del año 2004, la delegación de Los Molinos, compuesta por el alcalde, dos tenientes de alcalde, el técnico municipal y el secretario municipal en funciones, se aceptaron, posiblemente sin saberlo, que dichas cumbres pertenecieran exclusivamente a El Espinar.
Firmantes del deslinde de 2004 por el Ayuntamiento de Los Molinos
En el año 2004, como hemos dicho, se llevaron a cabo los trabajos y las reuniones para replantear, amojonar y realizar el levantamiento topográfico de la línea límite entre los términos municipales de Los Molinos y El Espinar, y en esos trabajos se reconocieron por los representantes de Los Molinos (Alcalde y dos Tenientes de Alcalde, Técnico Municipal y Secretario) los mismos nueve mojones que en el acta de 1879 y las líneas rectas entre ellos como límites del término municipal, sin que aparecieran en los documentos la reclamación de que la línea límite pasara, como ha venido siendo tradición y lógica, por las tres cumbres de La Peñota y por la cumbre del Cerro del Mostajo.

Ficha del mojón número uno, común a los términos de Los Molinos, Cercedilla y El Espinar, situado al Este de la cumbre de La Peñota
Ficha del mojón número 2, situado sobre la tercera cumbre de La Peñota que es conocida como Peña de Gibraltar
Desde este mojón, trazando una línea recta al primer mojón, deja en el lado de El Espinar y Segovia las dos cumbres más altas de La Peñota, como se puede ver también en las fotos aéreas incluidas  en el citado documento y en toda la planimetría oficial (y también en el plano editado por el Ayuntamiento de Los Molinos)
Recorte de la foto aérea incluida en el citado documento, en la que está trazado, en rojo, la línea recta entre el primer y segundo mojón, dejando al norte las dos cumbres más altas de La Peñota
Así en todos los mapas oficiales aparecen dos de las tres cumbres de La Peñota y la cumbre del Cerro del Mostajo enteramente en el término municipal de El Espinar, como se puede ver en el siguiente, del visor PlaneaMadrid:
Recorte del plano del portal PlaneaMadrid, con el deslinde entre El Espinar y Los Molinos en la zona de La Peñota, Cerro del Mostajo y Peña del Cuervo, con los mojones reconocidos señalados por unos cuadrados violeta
 (La próxima entrada será sobre el deslinde realizado en el año 1879)

1 comentario:

Ion Fernández de las Heras dijo...

Buenos días,
Me gustaría contactar con Adolfo Rodríguez Gil a propósito de esta interesante serie de entradas relacionadas con la historia de los límites entre Los Molinos y El Espinar.
Recientemente he llevado a cabo un estudio etnográfico para el Instituto de Cultura Tradicional Manuel González Herrero sobre cuestiones de linderos en el piedemonte segoviano y me gustaría pedirle permiso para la reproducción de algunas de sus imágenes (por supuesto, indicando su autoría).
Gracias y un saludo cordial,