viernes, 23 de mayo de 2025

19ª Jornada por la Memoria Antifascista de la Sierra de Guadarrama

 


3 comentarios:

Anónimo dijo...

Poner un cartel de memoria antifascista en el que sale uno de los mayores fascistas y criminales como Largo Caballero (asesinando incluso a gente de izquierdas por no hacer lo que el decía,-autentico manual de fascista-)no sé si da risa o pena

Anónimo dijo...

los sacerdotes fusilados en la carretera de la fuenfria , es memoria democratica?

Adolfo Rodríguez Gil dijo...

El franquismo y el posfranquismo ha querido seguir manteniendo un solo relato sobre sus asesinatos durante la guerra y durante los cuarenta años de dictadura.
Los vecinos de Los Molinos que fueron asesinados durante la guerra, en los primeros meses, merecen todo el respeto y consideración. Entre otras cosas lo fueron en contra de la legalidad republicana y en momentos de descontrol por el golpe de Estado militar-fascista. Esas personas fueron homenajeadas, tuvieron sus monumentos y nombres expuestos, sus familiares tuvieron reconocimiento y algunas compensaciones... aunque frente al asesinato ninguna compensación sea suficiente.
Los asesinados por la dictadura una vez acabada la guerra fueron parte de la represión sistemática y fría de un régimen criminal, que siguió matando hasta sus últimos estertores y más allá. Además, a los de Los Molinos, se les tiró en fosas comunes, sin nombre, sin el derecho a que sus familiares pudieran recordarlos, se les robaron sus propiedades (algunas, por fascistas de Los Molinos)
Estos vecinos fueron condenados a muerte por la farsa de los tribunales militares que les declararon culpables no de ningún crimen, sino de "rebelión militar". Los golpistas condenaron a muerte a quienes legal y legítimamente se opusieron al golpe criminal de las derechas.
La Memoria Democrática, a mi juicio, debería acoger a todos los asesinados y asesinadas. Esa es una tarea que tenemos.
La Memoria Antifascista tiene como fin recordar a los que se quiso sepultar dos veces, una matándoles y otra borrando sus nombres.
Por eso, ahora toca sobre todo reponer la memoria de los luchadores y luchadoras antifascistas de nuestra Sierra